sábado, 31 de diciembre de 2011

Último vómito de " El Mundo" contra Israel en este año 2011 . Mentiras y más mentiras con tal de atacar a Israel . Hoy ," Apartheid" en Jerusalem.

El Título del reportaje es "Apartheid" en Jerusalén . Fijese que entrecomillan Apartheid , como que es algo que dicen los palestinos , pero no el diario .Lo importante es que al lector le queda que hay un apartheid en Jerusalén contra los palestinos, y eso es lo que le interesa a este diario , hacerle a Israel el mayor daño posible a base de mentiras , verdades a medias y distorsión de la realidad . ¡¡Objetivo cumplido Sr. Pedro J. Ramirez !!


Esta persona es la responsable del ataque diario de "El Mundo" contra Israel.

Como siempre ,en este reportaje vomitivo ,aparaece una imagen insidiosa que no muestra la realidad.

"Apartheid" en Jerusalén

Las fachadas de piedra inmaculada dan una imagen de un Jerusalén armónico y limpio. Pero cuando uno se adentra en la parte este de la ciudad ese icono se desmorona. Allí no se respira una atmósfera límpida. En la calles del Jerusalén oriental se percibe el dolor y la desposesión. Este lado de la ciudad está cercado por un muro de hormigón tan gris como el futuro de sus habitantes. Muchos de ellos, palestinos, viven cada día con la amenaza del desahucio y la deportación suspendida sobre sus cabezas como una guadaña.

Jerusalén es una ciudad partida en dos por un 'apartheid' silencioso. La parte oriental, ocupada por Israel desde 1967, incluye la Ciudad Vieja. Trescientos mil palestinos viven en Jerusalén Este, encerrados en un área de nueve kilómetros cuadrados y rodeados por 61 kilómetros cuadrados de áreas anexionadas por Israel, 20 asentamientos judíos y el muro. "Los israelíes quieren ponernos en una jaula en donde no podamos movernos", asiente el gobernador de Jerusalén Este, Adnan Huseini.

Unos 100.000 palestinos viven al otro lado del muro que separa varios barrios del resto, corriendo el peligro de perder su estatus de residentes permanentes en la ciudad y, por tanto, de no poder hacer vida en ella. Desde 1967, 70.000 palestinos han perdido su derecho a residir en Jerusalén Este, de acuerdo con cifras que maneja Itay Epshtain, codirector del Comité Israelí contra las Demoliciones (ICAHD, en sus siglas en inglés), una ONG israelí que defiende los derechos de los palestinos que viven en Jerusalén y Cisjordania.

Nicolas von Arx, jefe de la Misión del Comité Internacional de Cruz Roja en Jerusalén, reconoce una "preocupación" especial de esta organización sobre las deportaciones en Jerusalén Este. "Los que se enfrentan a este problema no tienen un lugar a donde ir", añade. Según el abogado Osama Saadi, entre 1967 y 2006, han sido deportados 15.000 palestinos de Jerusalén. El artículo 49 de los Convenios de Ginebra prohíbe los traslados forzosos de población en territorios ocupados.

Israel practica encubiertamente una política de limpieza étnica, declarando ilegales a ciudadanos palestinos, prohibiéndoles acceder a parte de la ciudad, demoliendo casas y expulsando a sus familias para construir parques o barrios judíos, denegando a los palestinos los permisos para levantar casas nuevas mientras autoriza urbanizaciones donde sólo pueden vivir los judíos.

Pagar impuestos y no tener agua corriente

Hay tranvías que conectan los enclaves judíos alrededor de la ciudad, provista de zonas ajardinadas, mientras que los barrios palestinos carecen de los servicios más básicos: no se recoge la basura ni se reparte el correo. Los barrios palestinos se distinguen por los característicos depósitos de agua azules en las azoteas: es porque con frecuencia no tienen agua corriente. El 40% de los impuestos que ingresa la ciudad son pagados por los ciudadanos palestinos, el 33% de la población de Jerusalén. "Pagar los impuestos es para ellos una manera de demostrar que viven en la ciudad, por eso nadie los elude. Sin embargo, sólo entre el 6 y el 10% de esas tasas se reinvierten en los barrios palestinos", señala Epshtain.

"Puede ver que Jerusalén está dividido en dos partes. Una es bonita y la otra es fea y llena de sufrimiento. Esa es nuestra parte de la ciudad", afirma a ELMUNDO.es Murat Shafa, un vecino de Silwan, un barrio de Jerusalén Este. Sobre el hogar de Shafa y de muchos de sus vecinos pende una orden de demolición. Sus casas están en un área que las autoridades quieren convertir en un parque dedicado al rey David para atraer el turismo.

Sin permiso para construir una casa

Silwan, donde viven más de 50.000 palestinos, está conectado con el muro sur de Al Aqsa y la Ciudad Vieja. Al mismo tiempo, en este barrio viven 300 colonos judíos que poseen sus propios guardias armados. En Al Bustan, otra zona anexa, las viviendas de 1.500 personas están amenazadas por la construcción del parque temático sobre el rey Salomón, según ICAHD.

"No queremos construir nuestras casas sin permiso. Pero el problema es que nunca nos lo dan. Mi padre pidió la autorización para construir su casa hace 30 años. Ahora tiene 60 años. Nunca recibió el permiso", afirma Shafa en hebreo. Junto a otras familias, ha establecido una tienda de campaña para protestar contra los desahucios forzosos.

"Incluso los hacen pagar la demolición de la casa que declaran ilegal. Son entre 3.000 y 4.000 shekels (entre 600 y 800 euros) y si no se pagan, los encarcelan o les expropian el coche. Así que muchos tienen que pagar la multa en mensualidades. Por eso son tan pobres, por las multas que deben pagar, y por eso construyen así sus casas, porque nunca pueden hacerlo de forma legal", explica el responsable de la ONG israelí.

En Sheij Jarrah, barrio de Jerusalén Este, entrevistamos a cuatro familias que han sido desahuciadas, tras cuatro décadas de batalla legal. Um Nabil, una anciana de 89 años, es una de las personas que ha perdido su casa. "Dormimos durante más de seis meses en la calle", afirma.

"Me echaron de mi casa en agosto de 2009, al igual que a otras siete familias", cuenta Mariam el Ghami, vecina de Sheij Jarrah. "Llegaron a las cinco de la madrugada, cuando todos dormíamos, con cientos de soldados armados, como si fuera una guerra. Los comandos volaron la puerta y entraron, echando a los niños y ancianos", explica la nuera de Um Nabil.

"Nada más echarnos de nuestra casa y llevarse nuestros muebles en camiones, entraron los colonos con nuevo mobiliario", añade. Un tribunal israelí les condenó a pagar los gastos del deshaucio: 13.000 shekels (unos 2.500 euros). "Alquilé una casa en Shuafat, pero cada día vengo a ver mi hogar en Sheij Jarrah. Quiero que mis hijos sepan que esta es nuestra casa", afirma Mariam. "Como palestinos no tenemos derechos aquí. Los animales tienen derechos, pero a nosotros se nos niegan", reflexiona.

"Todo esto es parte de una política que Israel sigue cuidadosamente desde la ocupación de 1967: demolición de casas, cierre de Jerusalén, restricción de libertad de movimientos. Todo ello para forzar a los palestinos a dejar Jerusalén", señala Zakaria Odeh, activista de una coalición por los derechos cívicos.

Fuente:elmundo.es

viernes, 30 de diciembre de 2011

La prensa española se ceba con el "caso de los ultraortodoxos" . ¡¡ Menudo favor le están haciendo a los enemigos de Israel !!


Naama Margolese , la niña agredida por ultraortodoxos


"La vuelta al colegio de la niña que hizo explotar a los israelíes contra los judíos ultraortodoxos"
( Titular en el diario ABC )

La niña Naama Margolese, que se ha convertido estos últimos días en el símbolo de la lucha de los israelíes contra el sexismo de los judíos ultraortodoxos, ha vuelto al colegio por primera vez desde que un violento incidente provocara un movimiento de protesta por todo el país.

Con ocho años, Naama se convirtió en un nuevo caso de discriminación y acoso contra las mujeres al ser escupida y acosada por una ultra-ortodoxo por no vestir con el «suficiente recato». «Cuando iba a la escuela solía tener dolor de estómago debido a lo asustada que estaba, se pusieron a gritar y me escupieron», declaró a la agencia AP Naama.

El suceso fue el detonante de protestas contra las continuas agresiones a mujeres en actos públicos y autobuses por la comunidad ultraortodoxa. Miles de israelíes salieron a las calles bajo el lema de «Venimos a dispersar la oscuridad».

Incluso el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, criticó las agresiones a las mujeres al declarar en un discurso que «la exclusión de la mujer de los espacios públicos contradice el espíritu del judaísmo y los principios democráticos sobre los que fue fundado el Estado de Israel».

Este jueves, Naama, acompañada por su madre, ha llegado a la escuela tras las vacaciones por la fiesta de Janucá. En la escuela la esperaba el ministro de Educación, Gideon Saar, y miembros de la agencia gubernamental de los derechos de la mujer.

«Todo lo que ha pasado estos días conducirá a un cambio y las cosas ahora serán más tranquilas», declaró Hadassa Margolese, la madre de la pequeña, que esta vez no hizo ningún comentario. Hadassa reveló que ha intentado reunirse con la familia que agredió a su hija sin éxito.

La ciudad de Bet Shemesh, de unos 80.000 habitantes, la mitad de ellos ultraortodoxos, tiene un largo historial de enfrentamientos. En los últimos años se han impuesto unas normas de conducta que incluyen la separación entre sexos en colegios, calles y centros públicos. Las paredes del barrio están llenas de señales que indican que las mujeres deben vestir con el cuello cerrado, camisetas de manga larga y faldas largas.

Además de Naama, otras mujeres han sufrico ataques en la última semana. Es el caso de Tania Rozenblit, que se negó a cambiarse de sitio en un autobús público cuando varios ultraortodoxos le exigieron sentarse en la parte de atrás.

Según las reglas de comportamiento internas de esta comunidad ultra-religiosa, la mujer tiene un papel subordinado al del hombre. Una discriminación que se ha extendido al Ejército, símbolo de la igualdad en Israel. En los últimos años se han denunciado varios casos en los que oficiales exigían a las mujeres no cantar en ceremonias públicas.

Fuente:abc.es


Confirmados los peores augurios sobre Egipto - GEES

Las dos primeras fases del complejo proceso electoral egipcio están confirmando lo que algunos nos temíamos y que otros relativizaban: la victoria de los islamistas. Con el agravante de que no sólo ganan los supuestamente moderados –el Partido de la Libertad y la Justicia, nombre aceptable electoralmente de los veteranos Hermanos Musulmanes– sino que en segundo lugar van nada menos que los salafistas, es decir, aquellos a los que ni siquiera los más buenistas son capaces de considerar presentables. Entre unos y otros se llevaron el 60% de los votos en la primera fase de los comicios –el 37% la Hermandad y el 24% el partido salafista Al Nur–, y eso en un país en el que la mayoría de la población se muestra comprometida con el proceso (52% de participación).

En la segunda fase del farragoso proceso electoral que entre noviembre y diciembre ha permitido elegir a los miembros de la cámara baja –y entre enero y marzo completará los escaños de la cámara alta o Shura– no se ha hecho sino confirmar la tendencia, o mejor, agravarla: ahora, con una participación aún mayor (del 67%) los Hermanos Musulmanes han logrado casi idéntico apoyo (del 36,3%) y los salafistas de Al Nur han mejorado incluso sus resultados (28,8%). Ello nos demuestra que dos tercios de los votantes apuestan por el islamismo, incluido el radical, y que aquí no hay el "colchón" laico que los más optimistas presentan cuando hablan de Túnez o Marruecos: en Egipto el tercer partido clasificado ha sido el veterano Wafd, que sólo ha obtenido ahora el 9,6% de los votos emitidos.

Lo que está claro en Egipto es que si de un muro de contención puede hablarse, ése es ya el representado por las Fuerzas Armadas, y en particular por su Consejo Supremo, que es el poder desde la defenestración de Hosni Mubarak. Pero como quiera que tantos y tantos apuestan hoy, dentro y fuera del mundo árabe, por la implementación del "modelo turco" –el islamista de ahora, por supuesto, y no el laico de antes–, el papel de las Fuerzas Armadas acabará siendo relegado, por presión interna e internacional, en aras a que el poder civil, léase islamista, se imponga. El acoso al que está siendo y seguirá estando sometido el régimen sirio marca tendencia, y los militares egipcios están desgastándose cada día un poco más pues su represión de las manifestaciones en El Cairo –que han provocado 60 muertos y 2.000 heridos en lo que va de mes– y sus maniobras de cara a controlar la redacción de la nueva Constitución y a conservar sus privilegios son, probablemente, gestos tardíos una vez han dado cancha suficiente a los islamistas en todos estos meses.

Ante tales expectativas, bueno es observar a líderes crecidos, arrogantes cuando se olvidan de disimular, como Mohamed Badie (Hermanos Musulmanes) o Emad Abdel Ghafour (Al Nur) para visualizar lo que les espera a los egipcios y, por extensión, a sus vecinos próximos y lejanos.

GEES, Grupo de Estudios Estratégicos.
Fuente:libertaddigital.com

jueves, 29 de diciembre de 2011

El misterio de los Ashkenazi. Uno de los casos más notables del proyecto LonGenity es el de IRVING KAHN . Estudio con más de 500 judíos Ashkenazis .


Irving Kahn hace 105 años

Irving Kahn 105 años después delante de su ordenador

El acertijo médico de las personas que no se enferman

Fuman, toman, hacen poco ejercicio y aun así viven más de 100 años. El misterio de los Ashkenazi, un clan judío bajo estudio en Nueva York, podría estar en sus genes. Hoy, un grupo de científicos busca entender por qué no se enferman e intenta convertir ese don en terapias para el resto de las personas.

De baja estatura y sorprendentemente sanas. Así son las 540 personas entre 95 y más de 100 años que, sin haber sufrido nunca de enfermedades cardíacas, cáncer, diabetes o declives cognitivos, podrían actualmente esconder el secreto de la longevidad. Todas ellas participan de una investigación iniciada en 1998 que ya está dando resultados y que busca explicar cómo es que este grupo de "súper-envejecedores" ha llegado a vivir tanto. Dato para la causa: son descendientes de judíos Ashkenazi, una comunidad que se remonta al medievo y que vivió a lo largo del Rin en Alemania.

Desde hace más de 10 años, el endocrinólogo y profesor del departamento de Genética del Albert Einstein College of Medicine, en Estados Unidos, Nir Barzilai, tiene una idea fija: acabar con las debilitantes enfermedades asociadas con el envejecimiento. En entrevista con La Tercera deja claro que lo suyo no es alargar la vida de las personas, aunque reconoce que éste terminaría siendo un efecto secundario del objetivo principal de su investigación, la creación de drogas: "Si encontramos la razón de porqué la gente vive tanto, entonces podríamos encontrar la forma de producir medicamentos que aplazarían el proceso de envejecimiento y, con eso, aplazaríamos el proceso de las enfermedades relacionadas con la edad", dice.

Algo parecido a lo que hoy haría posible el resveratrol, asegura Barzilai, un antioxidante presente en la cáscara de la uva negra que, según un estudio de la U. de Maastricht en los Países Bajos, es capaz de reducir los niveles de azúcar en la sangre de hombres obesos, al igual que su grado de hipertensión y la cantidad de grasa en el hígado. El objetivo del uso del resveratrol, que también está presente en las moras, paltas y nueces, es el tratamiento de enfermedades relacionadas con el envejecimiento y los malos hábitos de salud, dice Barzilai, pero la prevención de estos factores de riesgo conseguiría, a la vez, alargar la vida de las personas.

Para cumplir su objetivo, Barzilai y su equipo convocó a un grupo de sorprendentes personas de Nueva York y las incluyó en el Estudio de Investigación LonGenity (una mezcla de las palabras longevidad y genética). Todas son judías. Sin embargo, el asunto no tiene nada que ver con la religión ni la historia de vida de cada uno y Barzilai lo explicita: los judíos Ashkenazi no tienen un don especial que los haga vivir más ni son productores, en sí mismos, de nuevas generaciones de "súper-envejecedores", como los llama el investigador. Pero de todas formas, viven más. O, más específicamente, no sufren de las enfermedades mortales que el resto enfrenta a cierta edad, lo que, obviamente, extiende sus vidas. La razón, explica el médico, está en ciertas características genéticas que se han mantenido gracias a la bajísima variabilidad genética de este grupo. La mayoría de ellos, hasta hace muy poco, nunca habría osado casarse fuera del clan.

Precisamente, esa fue la razón por la que estas personas fueron elegidas. Los Ashkenazi son una comunidad genéticamente homogénea, lo que simplifica mucho el estudio de su ADN. Según un artículo de la New York Magazine, este grupo proviene de judíos que vivieron cerca de 2500 años atrás. Florecieron durante el imperio romano, pero luego se dispersaron y redujeron su población en varios millones a sólo 400 familias, que dejaron el norte de Italia cerca del año 1000 y se fueron a Europa Central y del Este. Una vez en ese territorio, aumentaron significativamente en número, llegando a los cerca de 18 millones. Pero luego vino el Holocausto y, con ello, la disminución de la población. Estudios genéticos como el realizado por el doctor Doron Behar, del Centro Médico Rambam, en Haifa, Israel, han demostrado que el 40% de la población Ashkenazi proviene de sólo cuatro madres judías.

El peso de la genética

Nadie duda de que los hábitos de vida saludables conducen a una vida mejor y más larga. De muestra, basta considerar lo que descubrió un estudio del Erasmus M.C. University Medical Center, en Rotterdam: la gente que ejercita diariamente vive, en promedio, cuatro años más que el resto. Sin embargo, estos son factores que sólo refuerzan ciertas condiciones que vienen dadas por la más importante de las variables: la genética.

Es el caso de los centenarios que participan del estudio del Albert Einstein College, dice el doctor Gil Atzmon, quien también forma parte del equipo del proyecto LonGenity. Según comenta a La Tercera, él está convencido que frente a a longevidad, lo que más pesa son los genes y no los hábitos. "Estas personas no tienen un estilo de vida saludable: 30% es obesa o tiene sobrepeso, 25% reporta consumo de alcohol diario, 50% no hace ningún tipo de ejercicio y sólo un 20% sigue una dieta de bajo consumo de calorías", explica.

Y no se trata de cualquier genética. El equipo de Barzilai ya ha dado con algunas de las particularidades de este grupo. Por ejemplo, ha descubierto que la longevidad es un asunto hereditario, que se relaciona con una mutación presente en este clan, la cual mantiene elevado el nivel de colesterol HDL (el "bueno") y a raya el del LDL (el "malo"). Se trata de la variante del gen CETP (en inglés), que además se vincula con un menor declive de las capacidades cognitivas, un menor riesgo de demencia y una mayor protección contra las enfermedades cardíacas. Dos copias (una de cada padre) de este gen aparecen en sólo el 9% de los sujetos de control de este estudio, mientras que el 24% de los centenarios que participan de la investigación, las posee.

Otras variantes encontradas entre los "súper-envejecedores" son las del gen APOE, que protege contra la arterioesclerosis y el Alzheimer; una variante del FOXO3A, que blinda contra la formación de tumores y la leucemia; y otra del APOC3, que resguarda de las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Esta última, por sí sola, implica una extensión de cuatro años de vida.

Además, está el tema de la altura. El doctor Barzilai explica que la baja estatura de los participantes podría considerarse un factor de protección si se mira el patrón de la naturaleza. "Los pequeños viven más que los altos. Por ejemplo, los ponies viven más que los caballos y los perros pequeños viven más que los grandes. En el laboratorio ocurre lo mismo con los ratones. A pesar de que entre los centenarios sólo un 2% manifiesta esta mutación funcional en la expresión de la hormona del crecimiento, entre quienes viven menos de 100 años no se registra casi ningún caso. Quizá sea sólo un 2%, pero podría ser muy importante para la investigación", concluye Barzilai.

Y pronto todos podríamos gozar de estos beneficios. Actualmente, asegura el endocrinólogo, hay dos compañías farmacéuticas que se encuentran trabajando con los resultados de su investigación para diseñar drogas que harían que los genes de la mayoría de las personas se comportaran como los de los centenarios de su experimento. Merck y Roche, dice el médico, se encuentran en la fase III de ensayos clínicos para estos medicamentos, que deberían estar listos en un año o dos.

En el futuro de esta investigación se encuentra también el secuenciamiento completo de los genomas de todos los participantes de este estudio, que se extenderá a la descendencia de los centenarios para asegurar la veracidad de lo descubierto hasta ahora. "Como ves, diseñar drogas no está lejos", concluye un entusiasta Barzilai.

106 años y contando

Uno de los casos más notables del proyecto LonGenity es el de Irving Kahn, un hombre que cumplirá 106 años en diciembre y que "excepto por una ocasional visita al médico por un resfrío, nunca ha faltado un día al trabajo en más años de los que puede recordar". Es judío Ashkenazi y participa de la investigación de Barzilai, detalla la New York Magazine.

El empresario, cuyos tres hermanos también son parte del estudio (en 2001, cuando la menor, Helen, cumplió 100 años, pasaron a ser el cuarteto de hermanos más viejo del mundo), sigue al mando de la compañía que fundó y en la que también trabajan sus hijos. Allí revisa cada transacción, a pesar de los problemas obvios, aunque menores, de su avanzada edad.

Ya no ve ni escucha como antes, pero eso no le reporta mayores inconvenientes: cuando la degeneración macular empezó a dificultarle leer del computador, aprendió cómo agrandar las letras en la pantalla.

Jennifer Abate C.
Fuente:diario.latercera.com

IRVING KAHN , judío estadounidense , un "broker" de Wall Street celebra su 106 cumpleaños al pie del cañón


Irving Kahn

¡¡ 106 añós y trabajando !!

Nueva York, 21 dic (EFE).- Wall Street dejó esta semana por unas horas el frenesí de los vaivenes en los mercados para celebrar por todo lo alto el cumpleaños de uno de sus "broker" más populares, el estadounidese Irving Kahn, quien, a sus 106 años, sigue todavía al pie del cañón.

"Cuando empecé a trabajar en bolsa en 1928, Wall Street estaba diseñado para los ricos, los bancos, las aseguradoras, los dueños de los ferrocarriles y las empresas de servicios públicos, pero ahora no es un negocio sólo para ricos, es para todos", afirmó hoy el "broker" a la cadena CNN.

Presidente honorario de Kahn Brothers Group, una firma fundada hace más de tres décadas junto a sus hijos, especializada en asesorar a inversores en bolsa, Khan acude todos los días a trabajar a su despacho en el corazón de Manhattan.

El "broker", que cumplió este lunes 106 años, lee a diario el Financial Times y The Wall Street Journal y tiene las pantallas de Bloomberg en su mesa para poder consultar la evolución de los mercados cuando lo necesita.

Al igual que otros legendarios inversores como Warren Buffet, de 81 años, Kahan se proclama seguidor de las enseñanzas del analista financiero Benjamin Graham, padre del llamado "value investing", una corriente de inversores que buscan comprar acciones por menos valor que lo que realmente valen, también conocidos como "cazadores de gangas".

Cuando hace seis años cumplió cien años, la operadora de la Bolsa de Nueva York, el New York Stock Exchange (NYSE), invitó al veterano "broker" a presidir la ceremonia de clausura de los mercados y protagonizar el toque de la campana final en Wall Street.

Kahn dice sentirse "afortunado" de haber nacido en 1905 porque ha sido testigo de diferentes momentos de la revolución tecnológica, la radio, la televisión e internet, y ahora tiene teléfono móvil aunque reconoce que no lo usa mucho, y que cuando le hablan de jubilación responde que, por ahora, no tiene planes de retirarse. EFE

Fuente:abc.es

Si quiere ver todo lo que " El Mundo" lleva vomitado estos días contra Israel y haciendo propaganda gratis al grupo terrorista Hamás , ahí lo tiene .


Este sujeto es el responsable de toda esta bazofia

.....................................

"Rafah, la única ventana de Gaza para asomarse al mundo"

http://www.elmundo.es/elmundo/2011/12/16/internacional/1324074097.html

Continuamos con la propaganda

"Gaza, un 'tsunami' diario en la 'mayor prisión del mundo'"

http://www.elmundo.es/elmundo/2011/12/15/internacional/1323970251.html

Y más propaganda ...........

"Cuando el dolor está escrito en el apellido"

http://www.elmundo.es/elmundo/2011/12/17/internacional/1324077069.html


Pedro J. Ramirez y su diario " El Mundo" mienten, como siempre , y le hacen la propaganda gratis a Hamás . Veamos lo que nos prepararon para hoy .


"El 'museo del horror' de los presos palestinos"

En la sede del Ministerio de los Detenidos de Gaza hay un 'museo de los horrores'. Unos muñecos colgados por los brazos del techo de la habitación, esposados, se aparecen en una sala como fantasmas sin rostro.

A su lado, otro está suspendido en una silla a punto de caer, con las manos esposadas al respaldo. En una pequeña celda contigua, languidece enjaulado un cuarto. Sus cuerpos rellenos recuerdan a las pinturas del artista Botero sobre las torturas de Abu Ghraib.

"Es una exposición sobre cómo son tratados los prisioneros palestinos en las cárceles israelíes", explica un funcionario del Ministerio. "Lo hacemos para que las familias de los presos sepan en qué condiciones están sus maridos e hijos", afirma.

Hay maquetas de las cárceles levantadas en el desierto del Neguev, que recuerdan a Guantánamo. Muestran cómo los reos no tienen para guarecerse del inclemente clima más que las lonas de sus tiendas de campaña.

Hay cuadros realistas donde la sangre chorrea por los hombros de un preso con la cabeza metida en un saco negro. Hay marionetas esposadas y torturadas� Las mujeres y madres de varios presos pasean por la sala y se detienen a ver las maquetas. Algunas llevan velo integral ('niqab'), cubriendo de negro no sólo su cuerpo, sino su pena. Otras sostienen en sus manos las fotografías de sus hijos o maridos detenidos.

6.000 presos palestinos

Hay unos 6.000 detenidos y presos palestinos en las cárceles israelíes –unas 30 prisiones repartidas por la geografía de este país, sin contar con los centros secretos, según fuentes palestinas-.

Toda una cultura en torno al martirio rodea a estas personas durante toda su vida. El drama que vive una familia cuando sus allegados son detenidos por los soldados israelíes es materia de culto y se exhibe públicamente. La cárcel, la tortura o la muerte se convierte en motivo de orgullo, en propaganda en manos de los poderosos y en dolor callado de familias reunidas frente a la estufa del hogar.

"En Gaza, es más natural hablar de la muerte que de la vida", reflexiona Rana Shubair, traductora jurada de inglés y bloguera.

"Mientras caminas por las calles, ves los muros embadurnados con los grafiti sobre los mártires. En mi ruta hacia casa, paso por el taller de un fabricante de ataúdes y pienso que este hombre hace una fortuna gracias a la muerte. Paso por el cementerio, que está dentro de la ciudad y veo un cartel que dice: 'No hay más espacio para enterramientos aquí'.

Pero la gente ignora la advertencia porque es muy difícil inhumar a los fallecidos en el cementerio de la parte este de la ciudad, cerca de la frontera con Israel", añade.

La mirada mártir

Dondequiera que uno va, los ojos de los mártires miran fijamente. Sus imágenes están por todas partes: en los muros, en los semáforos�

Atenazan a los niños. "Si llevo a los niños a dar una vuelta en coche y paro en un semáforo, se encontrarán con una gran foto de un mártir y ahí llega la pregunta: 'Mamá, ¿quién es éste?' No hay escapatoria: 'Es un 'shahid' (mártir)'. No creo que esta palabra esté pasada de moda cuando hayan crecido", opina Shubair.

Forman parte del imaginario colectivo, del vocabulario común, palabras como 'shahid', o los nombres de las torturas que Israel suele aplicar a los detenidos, como 'shabah', que se usa para describir cómo un preso es encadenado durante horas a una silla inclinada. Cuando un prisionero menciona el 'shabah', todo el mundo sabe de lo que está hablando.

Sí, la tortura se aplica en Israel, un país que se llama a sí mismo "la única democracia de Oriente Próximo". "El Tribunal Supremo prohibió oficialmente las torturas físicas, pero entonces llegaron otras técnicas: la privación del sueño, las posturas forzadas durante horas, los interrogatorios de un detenido sin abogado y acosado por 10 interrogadores", incide Hasan Gabareen, abogado de la ONG Adala, la más importante organización que defiende los derechos humanos de los palestinos en Israel.

Crueles torturas psicológicas

Y también otras crueles torturas psicológicas como la celda de aislamiento, con presos que la han sufrido durante 16, 15 o diez años.

"Yo sólo estuve 40 días, pero Ahmed Chukri pasó 5 años confinado en solitario. Fue liberado en el último intercambio. Ahora, cuando la gente le habla, él sonríe y luego vuelve a su rincón, es incapaz de relacionarse", explica Zidane Mohamed Zidane, un joven enclenque que también ha sido excarcelado en octubre, después de que Hamas entregara a Israel al soldado Guilad Shalit.

Zidane es de Jenin (Cisjordania), pero ha sido desterrado a Gaza. "Fui condenado a cadena perpetua. He estado en la cárcel nueve años y cinco meses. Es como si no me hubieran liberado. No puedo ver a mi familia: ni ellos pueden venir ni yo puedo ir allí", se queja.

Samar Sueih tuvo a su hijo en una prisión israelí. Apenas tenía 21 años cuando fue arrestada y acababa de casarse. Estaba embarazada de un mes. "Me torturaron física y psicológicamente", afirma. "Me golpearon en la espalda, en el cuello y me esposaron durante horas a una silla inclinada", explica describiendo la popular 'shabah'.

Samar estuvo dos años y medio en prisión. Tuvo a su hijo por medio de una cesárea. "Di a luz con las manos y los pies esposados a la cama", cuenta. El niño estuvo con ella en la cárcel. "Rehusaron facilitarme cualquier cuidado para mí o mi hijo recién nacido. No me dieron ningún calmante para el dolor después de la cesárea", recuerda.

Las voces de todo este sufrimiento retumban en la habitación del 'museo de los horrores' del Ministerio de los Detenidos. "La cuestión es: ¿Cómo vamos a criar a nuestros hijos en esta atmósfera? Es muy difícil esconderles la realidad", se pregunta Subair.

Fuente:elmundo.es

Encuentran un sello ritual de hace 2.000 años en Jerusalén


Reza en arameo "puro por Dios", y sugiere que fue utilizado para certificar los alimentos y los animales utilizados en los sacrificios.

Arqueólogos israelíes han encontrado un sello de arcilla de hace 2.000 años cerca de Muro de las Lamentaciones de Jerusalén, lo que confirma los testimonios escritos sobre prácticas rituales en el templo judío bíblico.

El objeto con forma de botón tiene las palabras en arameo "puro por Dios", lo que sugiere que fue utilizado para certificar los alimentos y los animales utilizados en las ceremonias de sacrificio.

El Muro de las Lamentaciones es parte del complejo venerado por los judíos como el Monte del Templo, donde además se encuentran la mezquita de al-Aqsa y la Cúpula de la Capilla de la Roca.

"Parece que el objeto inscrito se utilizaba para marcar los productos u objetos que se trajeron al templo, y que era imperativo que fuese ritualmente puro", dijo la Autoridad de Antigüedades de Israel en un comunicado recogido por Europa Press.

Al parecer, se trata de la primera vez que se ha recuperado un sello de este tipo en una excavación, proporcionando evidencia arqueológica directa de la actividad ritual en el templo que se describe en los textos antiguos.

Fuente:libertaddigital.com

¡¡Menudo favor le hacen a Israel estos tipejos ultraortodoxos!! . Amor y obediencia a la Torá SI , sinrazón religiosa NO.


Un judío ultraortodoxo discute con otro ciudadano durante una protesta en la ciudad de Beit Shemesh ( Foto de "El País")

Miles de israelíes protestan contra la exclusión de la mujer por la comunidad ultraortodoxa.

Miles de israelíes se manifestaron este martes en la ciudad de Bet Shemesh, al suroeste de Jerusalén, contra la exclusión hacia las mujeres tras los recientes sucesos en los que varias de ellas han sido discriminadas y agredidas en actos públicos y autobuses por la comunidad ultraortodoxa.

Convocada bajo el lema de "Venimos a dispersar la oscuridad", según una máxima de la fiesta judía de Janucá que concluye mañana, miles de mujeres y hombres se concentraron en una céntrica explanada de esa ciudad para demandar justicia y que las autoridades hagan cumplir la ley.

"Hay un profundo cambio que no hemos visto, y que comienza por colegios en los que no se enseña a los niños sionismo, por gente que piensa que las mujeres no valen", declaró en el acto la jefa de la oposición y dirigente del partido Kadima, Tzipi Livni, al denunciar recientes actos de discriminación sexual, étnica y religiosa.

En el acto de protesta participaron políticas de distintas formaciones, entre ellas la ministra de Cultura, Limor Livnat, del partido gobernante Likud, y la jefa del Partido Laborista, Sheli Yejimovich.

Contra los principios del Estado

Poco antes de la convocatoria, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se sumó a las críticas y aseguró en un discurso que "la exclusión de la mujer de los espacios públicos contradice el espíritu del judaísmo y los principios democráticos sobre los que fue fundado el Estado de Israel".

"He pedido a todos los organismos que pongan fin a este fenómeno, y que lleven ante la justicia a todos los que difamen y ataquen a las mujeres", afirmó durante una comparecencia en un concurso de Biblia.

Bet Shemesh, de unos 80.000 habitantes, se ha convertido en el símbolo de la lucha contra la discriminación porque su creciente población ultraortodoxa ha impuesto en los últimos años unas normas de conducta que incluyen la separación entre sexos en colegios, calles y centros públicos.

Una vestimenta sin recato

"No puede ser que día tras día tenga que planificar el recorrido que voy a seguir por la calle para no encontrarme a los 'negros' (ultraortodoxos, por el color de sus ropas)", denunció Rajel Sanker, de 52 años, una de las vecinas de la ciudad que ha sufrido este tipo de agresiones.

Sanker, así como otras dos mujeres que han sido víctimas de ataques por no vestir de forma modesta según las normas religiosas, participaron este martes en la manifestación, que fue convocada por los grupos "Israel libre" y "Jerusalén despierta".

También estuvo la joven Tania Rozenblit, que la semana pasada se negó a cambiarse de sitio en un autobús público porque varios ultraortodoxos le exigieron sentarse en la parte de atrás.

Las comunidades ultra-religiosas viven generalmente alejadas del resto de la sociedad y con reglas de comportamiento internas en las que la mujer tiene un papel subordinado al del hombre, como es el caso de las alrededor de 40 líneas de autobuses segregados, donde se les reservan los asientos traseros.

El caso más reciente de discriminación y acoso contra las mujeres en Beit Shemesh lo sufrió una niña de ocho años de edad y familia religiosa a la que un ultra-ortodoxo escupió por considerar que no iba vestida con el suficiente recato.

Horas antes de la manifestación, el presidente del Estado de Israel, Simón Peres, llamó a la ciudadanía -"religiosos, seculares y tradicionalistas"- a "defender la naturaleza de Israel frente a un pequeño grupo que compromete la solidaridad de la nación".

La segregación aumenta

Pero el problema de la segregación se ha expandido estos últimos años a otras comunidades e instancias públicas.

En el Ejército, símbolo de la igualdad en la sociedad israelí, han sido denunciados varios casos en los que oficiales y soldados religiosos exigieron que soldadas mujeres no cantaran en ceremonias públicas por estar prohibido según las normas más estrictas judías.

Denuncias similares se han registrado contra varias alcaldías, instituciones y hasta empresas privadas que prohibieron la participación de mujeres en actos públicos o en campañas de publicidad para no irritar a la comunidad ultraortodoxa.

Dicha comunidad salió ayer a las calles de Bet Shemesh a protestar violentamente y este martes consiguió que la manifestación fuera trasladada del patio de un colegio para niñas a otro lugar más alejado de sus barrios.

Fuente:elmundo.es


viernes, 23 de diciembre de 2011

Aquí, Jerusalén - Juan Antonio Cabrera Montero

Jerusalén domina desde hace siglos no sólo la atención de las innumerables potencias políticas y religiosas que han ido reclamando la hipotética parte que supuestamente les correspondía de ella, sino la de todo miembro de cualquiera de las tres tradiciones culturales y religiosas monoteístas –judaísmo, cristianismo e islam– que la consideran parte de su patrimonio.

"Si me olvido de ti, Jerusalén, que se me seque la mano derecha; que se me pegue la lengua al paladar, si no me acuerdo de ti, si no te pongo, Jerusalén, en la cumbre de mi alegría". El autor del salmo 137, que narra los sentimientos del pueblo hebreo deportado en Babilonia, seguramente nunca imaginó que sus palabras serían las más fervientemente vividas y practicadas a lo largo de toda la historia. Ni judíos, ni cristianos ni musulmanes han dejado de tener presente a la ciudad santa a lo largo de tantos siglos de reivindicaciones, guerras, treguas, pactos, traiciones, construcciones y profanaciones. Ninguna mano se ha secado y ninguna lengua ha quedado pegada al paladar de nadie, aunque en ocasiones habría sido más que deseable. Todos, de una manera u otra, se han pronunciado sobre Jerusalén y todos han actuado en ella.

Simon Sebag Montefiore ha sido uno de los últimos en escribir sobre la ciudad santa. No podemos decir "el último" porque seguramente desde la aparición de este libro, hace pocos meses, se hayan seguido publicando innumerables artículos periodísticos, arqueológicos, históricos y teológicos sobre ella. No es que Jerusalén esté actualmente de moda, es que nunca ha dejado de estarlo. Pues bien, la monografía de SSM es probablemente el mejor estudio que se ha hecho sobre Jerusalén en mucho tiempo. Presenta cronológicamente la historia de la ciudad desde el momento en que aparecen las primeras referencias históricas, o al menos las primeras fuentes escritas creíbles, contemporáneas del rey David, hasta la reciente –aunque en Oriente Medio la noción de tiempo nunca ha sido algo que realmente importe– Guerra de los Seis Días. Al cuerpo de la obra le precede, por una parte, un prólogo explicativo en el que se insiste continuamente sobre la prudencia con la que se ha de afrontar el estudio y la lectura de un tema tan sensible como éste; y le sucede, por otra, un epílogo en el que, alejado del estilo de crónica predominante en el resto del volumen, el autor realiza un análisis más personal y político de los últimos años y de las perspectivas que se presentan.

Al lector, haya estado o no allí, le parecerá ir leyendo una historia familiar, porque Jerusalén forma parte innata de nuestra cultura. Los reyes de las monarquías hebreas, los jefes de las diferentes dinastías asirias, egipcias, griegas, romanas, árabes, otomanas, europeas..., todos han pasado por allí y han dejado su huella más o menos marcada. Todos han construido esa Jerusalén que hoy se nos presenta demasiado cargada de historia y muy desprovista, como siempre, de un presente y de un futuro estables.

El libro está dividido en nueve partes principales, que reflejan los períodos históricos que han marcado el carácter de la ciudad: judaísmo, cristianismo, paganismo, islam, cruzadas, mamelucos, otomanos, imperio y sionismo. Junto a esta historia oficial, que ve a la propia Jerusalén como parte integrante de proyectos políticos o religiosos de diferentes imperios, el autor presenta muchos datos sobre otros protagonistas más desconocidos pero igualmente importantes y decisivos. Numerosos aspectos de la vida cotidiana, la más real si se quiere, enriquecen el libro y lo convierten en una verdadera biografía. Hay aquí abundante información, bien distribuida y sobre todo bien documentada. A las breves aunque numerosas notas explicativas a pie de página se añaden más de cien páginas de bibliografía, setenta de ellas dedicadas a indicar las fuentes consultadas al abordar cada uno de los temas tratados a lo largo de toda la narración. Lástima que la edición española no esté a la altura del original: al precio excesivo e injustificado se añaden no pocos errores de traducción y de edición –la transliteración, por ejemplo, de algunos nombres y términos hebreos y árabes hiere la vista–.

Con todo, insisto: se trata de una óptima monografía de lectura más que recomendable, que permitirá a quien a ella se acerque disfrutar de este patrimonio común que es Jerusalén. Conocer con más detalle la ciudad que ha estado presente en la mente y en el corazón de millones de personas a lo largo de los siglos. Entender la santidad del lugar y al mismo tiempo su excesiva humanidad. Quiénes la han verdaderamente amado, protegido y venerado; quiénes la han mancillado, manipulado y desvirtuado.

El juicio de cada lector, al igual que el de este reseñador, será subjetivo, como no podía ser menos. Habrá quienes encuentren motivos para justificar su simpatía, su indiferencia o su animadversión por uno u otro grupo religioso, político o social. Podrá, quizás, crear o modificar su posición sobre el actual conflicto que padece la ciudad y emitir un juicio, también personal, sobre las causas del mismo y sus posibles soluciones. Podrá hacer todo esto porque habrá leído un libro bastante equilibrado, que no esconde las vergüenzas de ningún grupo religioso, de ninguna raza y de ningún movimiento político, antiguo o contemporáneo.

SIMON SEBAG MONTEFIORE: JERUSALÉN. LA BIOGRAFÍA. Crítica (Barcelona), 2011, 853 páginas.


martes, 20 de diciembre de 2011

Jag Hanukah Sameaj - Feliz Hanukah a todos.


Encendido de la primera vela de Hanukah en " Casa de Israel"


1. Baruj Atá A-do-nai E-lo-heinu Melej Haolam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu lehadlik ner Janucá.

2. Baruj Atá A-do-nai E-lo-heinu Melej Haolam sheasá nisím laavotenu baiamim hahem bizmán hazé.

3. Baruj Atá A-do-nai E-lo-heinu Melej Haolam shehejeianu vekiemánu vehiguianu lizman hazé.


1. Bendito eres Tú, Di-s nuestro Señor, Rey del Universo, Quien nos ha santificado con Sus preceptos y nos ha ordenado encender la vela de Janucá.

2. Bendito eres Tú, Di-s nuestro Señor, Rey del Universo, Quien hizo milagros a nuestros antepasados, en aquellos días, en esta época.

3. Bendito eres Tú, Di-s nuestro Señor, Rey del Universo, Quien nos otorgó vida, nos sustentó y nos hizo llegar hasta la presente ocasión.

...................................................................

Queremos desde " Casa de Israel" felicitar a Israel y a todo el pueblo judío en esta fiesta de Hanukah.


Uno de los últimos regalitos que nos deja Zapatero antes de irse . Nos podemos imaginar la propaganda antiisraelí que se lanzará desde este medio .


El jeque que presidela Fundación para el mensaje del Islam

Arranca la TV islámica en español

Con las Navidades llegaron las televisiones islámicas. Dos canales vía satélite en español, uno iraní y otro saudí, van a empezar a emitir, mañana miércoles y el 1 de enero respectivamente, las 24 horas del día a través de los satélites Hispasat para España y América Latina, según fuentes del sector audiovisual.
Mañana empieza a emitir el canal de Irán para España y Latinoamérica

Córdoba Televisión iniciará sus emisiones, el 1 de enero, desde las dos naves que adquirió en San Sebastián de los Reyes (Madrid). Es propiedad de la Fundación para el Mensaje del Islam que preside el jeque saudí Abdulaziz al Fawzan y cuenta con el respaldo de la familia real saudí.

Su programación inicial, que se ampliará paulatinamente, será de ocho horas diarias, que se repetirá tres veces. Consistirá en reportajes, documentales y charlas relacionadas con la religión.

Para elaborar esos programas los colaboradores del jeque han contratado a medio centenar de trabajadores, en su mayoría españoles conversos aunque también han fichado a golpe de talonario a algunos profesionales de Antena 3 y de Telecinco. Cuentan además con pequeños equipos en Argentina y Colombia porque es allí donde son más numerosas las minorías musulmanas en América Latina.

El jeque Al Fawzan lleva años dedicado a la difusión del wahabismo, el islam ultraconservador que rige en Arabia Saudí. Él mismo lanza sus soflamas en la televisión saudí Al Ikhtariya y en la emiratí Al Majd en las sostiene que hay que profesar un "odio positivo" hacia los cristianos y justifica la marginación de la mujer en su país.

Profesor de teología islámica en la Universidad Imán Mohamed Ibn Saud, es miembro del Comité de Supervisión de la Sharia (ley islámica), que se aplica en Arabia Saudí, y de la Comisión de Derechos Humanos, un organismo al servicio del régimen.

Al Fawzan anunció, a principio del año pasado en diversas webs islámicas, el lanzamiento de su televisión en español, a la que bautizó con el nombre de Córdoba porque fue la capital del Califato (siglos X y XI) instaurado en la Península Ibérica que los teólogos musulmanes añoran porque se corresponde con la época de mayor esplendor de su religión.

Córdoba Televisión debía salir al aire, bajo la dirección del marroquí Said Jedidi, en agosto pasado, pero conflictos personales y problemas burocráticos retrasaron su estreno cinco meses.

Hispan TV nace, en cambio, mañana con algo más un mes de retraso sobre la fecha anunciada. Es la televisión iraní desde Teherán, pero para el mundo hispano y en la que trabajan un puñado de periodistas españoles.

El eje de su programación, de 16 horas diarias -se ampliará a 24 a finales del invierno-, serán los informativos, en los que abundará la actualidad latinoamericana, pero el canal ofrecerá también películas y series iraníes dobladas al castellano, así como debates sobre cine, literatura y, por supuesto, religión. En Debate abierto se dará a conocer el islam chií que impera en Irán.

"Esta nueva cadena en español tendrá un papel fundamental a la hora de reflejar la legitimación ideológica de nuestro sistema [político] en el mundo", declaró, en octubre, Ezatollah Zarqami, presidente de IRIB, el ente que reagrupa a las televisiones públicas de Irán, las únicas que existen en el país. Hipan TV está integrada en IRIB.

Fuente:elpaís.com

lunes, 19 de diciembre de 2011

Discurso de Hermann Tertsch en la cena de Gala de la Comunidad Judía de Madrid


Querida presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, estimado presidente de la Comunidad judía de Madrid, Samuel Bengio queridos amigos todos los congregados hoy aquí en la Fiesta de Gala de Or Januká del 5772. Un saludo lleno de afecto a todos los presentes. Y también a los ausentes. Y entre ellos, me permitirán un especial recuerdo, lleno de cariño, reconocimiento y admiración a Mauricio Hatchwell, el amigo inolvidable, mío y de tantos de Ustedes, que nos ha dejado este año. Su amor poderoso y generoso, su inteligencia extraordinaria, su entusiasmo por la vida y su energía contagiosa, son un ejemplo y un regalo precioso que nos legó a todos los que tuvimos el privilegio de su amistad.

Sólo aquellos que me conocen bien saben lo profundamente que me emociona y me honra que me hayan elegido para hablarles hoy aquí a todos Uds. Alguien que, como yo, se dedica a escribir y a describir, a analizar y a narrar el presente, tiene siempre dos opciones. Puede lidiar con lo inmediato, sacando rápido provecho al acontecer diario y a los vaivenes políticos y sociales. Al fin y al cabo, el periodismo es por antonomasia el trato con lo perecedero, sea un hecho, una idea o una sentencia.

Yo siempre he creído en un periodismo que va más allá. Que aporta contexto histórico, cultural y político al acontecer. Que busca las razones profundas tras la aparente banalidad de los hechos. Que expone la reiteración del factor humano y la pulsión del pasado sobre el presente, más allá de la descripción mecánica de los acontecimientos. He aprendido de cientos de periodistas. Pero entre los que más me ha marcado está Egon Erwin Kisch, contemporáneo de Kafka y judío praguense como él. Era un maestro en el encuadre del acontecimiento en la historia, también en la historia con mayúsculas. El mundo de Kisch, nacido aun en el Imperio Austrohúngaro y muerto en 1948, es un mundo del que culturalmente me siento miembro. Que me ha marcado cultural y sentimentalmente como ningún otro. El periodismo centroeuropeo, desde Karl Kraus a Victor Adler o Kurt Sonnenfeld, que se suicidó, acosado por la peste nazi, era una potencia cultural y humanista. Dirigida por todos estos grandes periodistas judíos que eran los que mejor sabían preguntar.

Es el de Isaac Bashevis Singer con cuyos cuentos mejorábamos en casa el inglés. Un inglés tan salpicado de términos yiddish como el alemán de Friedrich Torberg y su inolvidable Tante Jolesch. Y las narraciones de Manes Sperber. U otro sefardita austrohúngaro, Elias Canetti o el genio del periodismo y el relato que fue aquel judío de la remota Bukowina que se llamaba Joseph Roth. Es en resumen la Mitteleuropa, una patria cultural que siempre se sumó a la española en mi identidad caleidoscópica. O sí se quiere utilizar un insulto propio de las mentes torpes y cerradas del nacionalismo o de los odiadores desde el igualitarismo ideológico, un insulto por cierto tantas veces utilizado contra los judíos, mi cosmopolitismo. Siempre eso sí profundamente europeo.

En este mundo centroeuropeo, el elemento judío es el aglutinador espiritual y el catalizador de la efervescencia cultural. Ahí están muchas de las claves que se han convertido a lo largo de mi vida en referentes en el esforzado intento cotidiano por comprender el mundo y convertirme en mejor persona. Entre las frases más profundamente grabadas de mi niñez tengo la de la explicación de mi padre a una escena en un colegio en un shtetel, un pueblito judío, en la Polonia profunda a una decisión en principio sorprendente al repartir los elogios un rabino. Supongo que sería de un cuento de Bashevis Singer. Me explicó mi padre: “El mejor no es el que cree saber más, sino el que mejor pregunta”. Siempre lo recuerdo. Hacer siempre la mejor pregunta, buscar las fisuras entre las realidades y por los laberintos y contradicciones de la lógica y la vida.

Buscando, siempre buscando, verdades. En busca de lo auténtico. Que siempre es lo bello y lo bueno. Y siempre haciendo preguntas. Queriendo siempre hacer, hacerse a uno mismo, las mejores preguntas. En el trabajo y en la vida, este esfuerzo por la superación, por la educación continua, de curiosidad y ganas de conocer y entender, de admiración y emulación de la excelencia, de la sana envidia de la bondad ajena, de humilde conciencia de la vulnerabilidad y firmeza en la vocación de la verdad. Son las máximas que siempre han estado marcadas por aquella frase de mi padre y la imagen del pupitre con niños con tirabuzones con la mano alzada.

Aquel mundo del que les habló es un mundo que se hundió en el infierno de los hornos crematorios del Holocausto. Así hemos llegado al acontecimiento central de la historia. Y que tienen no por casualidad a los judíos como trágicos protagonistas. Es el acontecimiento histórico que condensa todas las energías del choque brutal de las fuerzas del bien y del mal. Allí se juntan todos los caminos para el combate frontal entre la barbarie criminal y la cultura de la humanidad, la bondad y la belleza.

El holocausto es el hecho filosófico central de la historia moderna.

En el que se enfrentan con toda radicalidad total los dos proyectos posibles del hombre sobre la tierra. La negación y la afirmación del hombre en Dios, del carácter sagrado del ser humano. En un lado el proyecto de bondad, humanidad, amor, libertad, inteligencia, humor y compasión. En el otro la bestial certeza de la aniquilación, la inapelable apuesta por el hombre sin alma del nazismo. Quienes no entienden esto, quienes son incapaces de ver su carácter único, carecen del elemento fundamental para analizar la evolución posterior de la modernidad.
Aquí en España esto por desgracia es evidente. El aislamiento de España durante muchos años es una explicación. La desgraciada falta de conocimiento y reflexión sobre el Holocausto lleva a muchas confusiones. A mucha superficialidad en el juicio. Y todos Ustedes lo pagan de alguna forma con un antisemitismo que hoy se disfraza preferentemente de fobia a Israel. En el fondo es el mismo que el medieval, germen después del antisemitismo político moderno que lleva al Holocausto. El miedo y el odio al diferente que existe en todas las comunidades humanas siempre se volcó contra los judíos a lo largo de la historia. Con la modernidad, las ideologías que luchan contra la pregunta, contra la duda, contra el pensamiento y por tanto, contra la libertad y contra la pluralidad, tienen hoy el mismo objeto de odio obsesivo. Pero como los judíos casi desaparecieron con el Holocausto en Europa y en Oriente Medio después de las sucesivas guerras a partir de 1948, –en España 500 años antes– hoy ese odio se concentra en Israel. Todas las ideologías, religiosas o no, que combaten la pregunta, la discrepancia, niegan la libertad y la supremacía del individuo, ven a Israel como un enemigo. Es regla sin excepción. Toda vocación totalitaria odia a Israel como objeto de su fobia contra lo judío, el máximo exponente de una libertad que no pueden aplastar más que con la liquidación.

Y aquí entro en el terreno de la absoluta incertidumbre de una actualidad en pleno movimiento que me ha pedido mi querido Samuel Bengio repase brevemente. Israel vive rodeado de enemigos. Son enemigos que se hallan hoy en plena efervescencia interna. ¿Serán en el futuro más o menos enemigos de Israel? ¿Habrá posibilidad real al final de este camino de una convivencia más abierta y pacífica o habrá que resignarse a que las próximas generaciones en Israel continúen en permanente estado de guerra? La respuesta fácil es que es imposible decirlo hoy. Porque el camino de las sociedades árabes ahora sublevadas contra sus dictaduras acaba de comenzar. Y sería iluso esperar pronto en ellas estabilidad. Ni para bien ni para mal. Por supuesto que se equivocan los ilusos que vieron en las insurrecciones el amanecer de una pronta democracia en los países árabes. Pero creo que tampoco tienen razón quienes consideran que está ya escrito que los nuevos regímenes caerán en manos de los peores. Y que pronto todo todos aquellos países tendrán tiranías salafistas o jomeinistas. Nadie dude de que Arabia Saudí e Irán lo van a intentar y rivalizarán en ello. Ambos son enemigos mortales de Israel pero también de la libertad de los países árabes.

Pero nadie debe olvidar que estas dos metrópolis del fanatismo –no sólo en Oriente Medio- sino en todo el mundo, tienen también los pies de barro. Teherán tuvo que reprimir a sangre y fuego a su propia juventud en el 2009. La desafección interna crece y la movilización ideológica ya no cuaja. Teherán puede ser pronto otra pieza en el dominó. Riad también lo teme. Aplasta los levantamientos en Bahrain y otros puntos. Pero sabe que no podrá comprar indefinidamente su estabilidad sembrando la desestabilización lejos de sus fronteras. Arabia Saudi e Irán son los más activos enemigos de Israel y Occidente. Y no sólo en Oriente Medio. Unos como exportadores del wahabismo por todo el globo. Véase Pakistán. Y los otros, los ayatollahs, con operaciones más clásicas de Estado totalitario, como la penetración ya alarmante en Latinoamérica a través de la plataforma que es el régimen de Chávez en Venezuela.

Pararle los pies a Arabia Saudí en la actual coyuntura económica mundial parece imposible. Para el régimen de Teherán yo creo que la situación es más precaria. Y que pronto puede contar con contestación interna pero también con un ataque exterior. No sé si lo hará Israel en solitario o no. Sí sé que Occidente no se puede permitir un régimen como el actual con armamento nuclear. No digo Israel, que se sobreentiende. Digo Occidente. Y evitarlo es tarea de todos.

Hay otro actor principal en Oriente Medio que es Turquía. En permanente rivalidad con los dos anteriores por la hegemonía en la región. En el marco de esa lucha por la popularidad y hegemonía en Oriente Medio hay que entender la hostilidad hacia Israel de que hace gala el primer ministro Erdogan. La lucha de esas tres fuerzas se verá pronto con la implosión del régimen sirio de Assad, donde podríamos estar ante una muy cruenta guerra civil. Pero también Turquía sobrevalora sus fuerzas. Especialmente Erdogan ha caído en una megalomanía de la que pronto se podría ver obligado a bajarse. Por un pinchazo de la burbuja económica turca y consiguientes problemas internos. Y porque Ankara infravalora el recelo árabe al antiguo ocupador otomano.

Para concluir esta rápida e incompleta visión panorámica. Aunque algunos países, quizás Túnez, quizás Libia, puedan entrar en relativa estabilización de un régimen aceptable evolutivo, la inestabilidad –muchas veces violenta- será la tónica reinante en muchos vecinos de Israel en el futuro previsible. Pero las minorías urbanas ilustradas y la inmensa mayoría que es la juventud, cada vez más informada sobre el mundo exterior, no se van a conformar con cambiar una dictadura por otra. Exigen libertad y se miran en nuestras sociedades que son sencilla e inequívocamente mejores. Me adhiero por tanto a la visión del presidente Simon Peres, -expresada por cierto durante su visita a España, en el hogar madrileño de nuestros queridos Mauricio y Monique-. De que lo empezado hace tan sólo un año ahora en Túnez, que ha derribado ya cuatro dictaduras, no tiene por qué acabar de la peor forma posible.

Esperanza, cautela y vigilancia. Cierto, las posibilidades de influenciar la evolución son mínimas. Habrá que estar atentos y aprovecharlas. Para ayudar a quienes defienden una sociedad como la nuestra. Pero habrá que estar siempre con la guardia alta. Nuestros enemigos han de temernos. Y el baremo para medir la calidad de los nuevos regímenes será precisamente su actitud frente a Israel. No hay mejor baremo. También para las sociedades occidentales. Dime como te llevas con tu comunidad judía, dime como te llevas con Israel y te diré cuál es la calidad de tu democracia y tu respeto a la libertad y a la sociedad abierta. Lo hemos visto en Madrid. Y lo simboliza como nadie Esperanza Aguirre. Esta calidad ha mejorado sin duda con la desaparición de ciertos responsables de ayuntamientos que gastaban parte del erario público en el activismo a favor de grupos terroristas como Hamás, disfrazados de flotillas u otras ideas imaginativas.

Está bien que agradezcan a la presidenta de la Comunidad su compromiso con los judíos madrileños y con Israel. Pero también deben saber que quienes lo hacen con tanta convicción como ella, y yo me incluyo, sabemos que defendiendo a nuestra comunidad judía defendemos la calidad humana y política de nuestra democracia. Como sabemos también que la defensa de Israel es la defensa del bastión capital de Occidente, del mundo libre. Una defensa que jamás se puede delegar ni confiar a la buena voluntad del enemigo. Que nos odia con razón porque nuestra existencia revela su indigencia.

En la defensa de Israel defendemos la civilización que ha generado la sociedad democrática occidental, de raíces judeocristianas, la más libre, próspera y compasiva que jamás ha existido en la historia de la humanidad. Esperanza Aguirre y yo estamos de acuerdo en muchísimas cosas. También en que en el permanente conflicto entre la brutalidad totalitaria y la sociedad abierta de la libertad, la humanidad, la compasión y la excelencia, Israel somos nosotros. Nosotros somos Israel.

Hermann Tertsch, 17 de Diciembre de 2011


sábado, 17 de diciembre de 2011

La inolvidable gesta de las hermanas Touza . Poemas después de Auschwitz


Fue Antón Patiño Regueiro, librero y escritor monfortino, el encargado de desenterrar la vieja historia de las hermanas Touza, -Lola, Amparo y Julia-, vecinas de la localidad de Ribadavia (Ourense). El relato llegó a sus oídos a través de Amancio Vázquez, un exiliado gallego a quien un judío residente en Nueva York le había encomendado la tarea de trasladar su más profundo agradecimiento a las hermanas.

Fue así como, tras años de investigación y pactado silencio, en el ocaso de la vida de su autor, vio la luz 'Memoria de Ferro'. Corría el año 2005 y la obra de Patiño daba a conocer, tras más de 60 años en el anonimato, una gesta de dimensiones extraordinarias, ambientada en el corazón de la comarca del Ribeiro en pleno fragor de la Segunda Guerra Mundial. Su historia, la de ellas, la desinteresada labor de tres heroínas de carne y hueso; pero también la de ellos, la de cientos de judíos anónimos que fueron ayudados a huir, a continuar huyendo.

Ribadavia era entonces el penúltimo enclave en el éxodo de los judíos que atravesaban España para buscar asilo en Portugal, perseguidos por la Gestapo, tratando de dejar atrás la alargada sombra de la 'shoah', el más cruento holocausto perpetrado a lo largo de toda la historia de la humanidad. Desde el paso fronterizo francés, en los Pirineos, hasta Medina del Campo, para retomar después el camino del norte, vía Monforte de Lemos para llegar a Ribadavia.

Allí, Lola y sus hermanas ya estaban aguardándolos. "Regentaban una cantina que, en realidad, era como un quiosco situado en la estación del ferrocarril. Los trenes se detenían para repostar agua. Eran paradas de larga duración y cuando los viajeros bajaban al andén, mi abuela aparecía con rosca, licor café y melindres, para los que tenía una receta que no compartía con nadie", recuerda María Inés Touza, nieta de Lola.

Las tres hermanas regentaban una cantina cerca de la estación de ferrocarril.

Las tres hermanas regentaban una cantina cerca de la estación de ferrocarril.

El modus operandi

La sabrosa receta de los melindres no era, sin embargo, el más importante secreto que guardaban las hermanas. "La cantina tenía un zulo excavado en el terreno y en la casa donde vivían, el antiguo casino de Ribadavia, había también un viejo sótano. Era allí donde ocultaban a los judíos y donde llegaron a esconder también a republicanos durante la Guerra Civil", confiesa el arquitecto Julio Touza, hermano mayor de María Inés y portavoz de la familia.

Lola, Amparo y Julia ofrecían manutención a los judíos evadidos en su propio domicilio antes de tramitar su fuga, "cruzando el río Miño en la penumbra de la noche", hasta alcanzar territorio luso.

Precisamente a raíz de una de esas travesías en barco, las hermanas Touza entraron en contacto con Ramón Estévez, quien participó en la huída de los judíos y quien, por suerte, todavía vive para contarlo.

"Ramón Estévez trabajaba de barquero ayudando a su padre, que colaboró con mi abuela para auxiliar a un hombre que había llegado a Ribadavia procedente de Mauthausen. Todos prometieron guardar silencio", explica Julio Touza.

'El Evangelista'

La red clandestina de la que las hermanas Touza formaban parte, probablemente la más importante de toda la península ibérica en aquellos años, estaba integrada también por otros vecinos de la localidad y de los alrededores de la comarca. De entre todos ellos, sin cuya participación la empresa hubiese resultado irrealizable, la contribución de Ricardo Pérez Parada, 'El Evangelista', resultaba determinante.

"Ricardo había emigrado a Nueva York en torno al año 1904, en donde había trabado amistad con un polaco que vendía picadura y tabaco de mascar. Aprendió el oficio de tonelero y, a su regreso, como sabía inglés y un poco de polaco, hacía las funciones de traductor. Se había convertido al protestantismo y pasaba inadvertido porque hablaba muy poco. Era una persona honesta y brillante", relata el nieto de Lola Touza, antes de agregar que los restos mortales de su abuela "yacen en el panteón familiar, situado pared con pared con el lugar donde reposa 'El Evangelista', en un panteón civil".

[foto de la noticia]

El número total de judíos auxiliados por las hermanas Touza no ha podido aún, ni probablemente jamás, ser clarificado. "Se habla de más de 500 pero con uno solo hubiese suficiente para reconocer su enorme labor", sentencia Julio Touza, en un alarde de honestidad.

Lola Touza murió en la habitación de su domicilio en 1966 a causa de un derrame cerebral que propició un fallo cardíaco irreparable. Tenía el corazón demasiado grande.

El merecido reconocimiento

El 7 de septiembre de 2008, la labor humanitaria de las hermanas Touza fue conmemorada en su Ribadavia natal, con un sencillo y emotivo homenaje póstumo brindado por amigos y vecinos, auspiciado por el Centro de Estudios Medievales de la localidad. Una placa grabada en su nombre, con el enunciado 'Loitadoras pola liberdade', mantiene viva la gesta de las hermanas en la fachada de la que fuera su casa, una casa en donde, en palabras de Julio Touza, "siempre había pan para todo el mundo".

Su casa de Ribadavia (Ourense).

Su casa de Ribadavia (Ourense).

La tremenda magnitud de esta hazaña también ha sido reconocida por el estado de Israel. En su capital, Jerusalén, un árbol evoca la labor de Lola, Amparo y Julia, mientras continúan adelante los trámites para otorgar a las hermanas de Ribadavia el título de 'Justas entre las Naciones', una distinción que equivale a la beatificación cristiana y para cuyo reconocimiento efectivo el testimonio en primera persona de Ramón Estévez se antoja determinante.

Como ya hiciera Steven Spielberg en 1993, con su oscarizada cinta 'La Lista de Schindler', en la que Liam Neeson encarnaba en la gran pantalla al empresario alemán que, entre los años 1943 y 1945, había logrado salvar la vida a más de 1.000 judíos, la historia de las hermanas Touza también ha llamado la atención de diferentes productoras cinematográficas.

"Un emisario de Spielberg se interesó por la historia y luego preguntaron desde Francia pero siempre dijimos que el tiempo nos diría cómo y cuándo habría que contarla. Ahora nos hemos decidido a dar el paso y hay una productora gallega a la que le hemos pedido la máxima seriedad a la hora de emprender el proyecto", revela Julio Touza quien, por el momento, prefiere ser prudente.

Se especula que 'Claqueta Coqueta', del actor y director gallego, Rubén Riós, podría ser una de las productoras inmersas en un proyecto cinematográfico del que no se conocen aún más detalles.

Lo único que resulta, por el momento, del todo cierto, es la voluntad de trasladar al cine una historia tan real como la vida misma, una radiografía del altruismo en una época artificialmente deshumanizada, "un ejemplo de entrega, generosidad y valentía".

Para el filósofo alemán Theodor W. Adorno, escribir poesía después de Auschwitz podría ser considerado un acto de barbarie. Sin embargo, ¿no es acaso éste un poema, un sentido canto de amor hacia el conjunto de la humanidad?

Fuente:elmundo.es

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Hamás se vanagloria de haber asesinado a 1.365 israelíes en 24 años


Las Brigadas de Ezedín al Kasam, grupo terrorista vinculado a Hamás, publicaron los datos de sus 24 años de actividad, que conmemoran este miércoles y en los que se atribuyen el asesinato de 1.365 israelíes y el lanzamiento de 11.039 cohetes o proyectiles de mortero contra civiles en Israel.

Desde su creación el 14 de diciembre de 1987, los terroristas islamistas han efectuado 1.117 ataques, de los que 87 fueron atentados suicidas en Israel, según un comunicado de la organización armada. En los ataques, cuya frecuencia ha disminuido notablemente en los últimos años, resultaron heridos 6.411 israelíes. Los terroristas han perdido, por su parte, 1.848 hombres, de acuerdo con sus datos.

Las Brigadas también contabilizan 24 intentos de secuestrar soldados para su posterior canje por presos palestinos, de los que sólo "uno triunfó", el de Guilad Shalit, en 2006, liberado el pasado octubre a cambio de la excarcelación de más de mil palestinos.

El aniversario se celebra este miércoles en el parque de Al Katiba, en el oeste de la ciudad de Gaza, con la asistencia de decenas de miles de seguidores de Hamás.

Con motivo de la efemérides, Hamás ha difundido un comunicado en el que reafirma su apuesta por "todas las formas de resistencia" y subraya el "fracaso" de la opción negociadora con Israel, practicada por Al Fatah, que lidera el presidente palestino, Mahmud Abás.

El grupo terrorista destacó asimismo su "compromiso" con la reconciliación con Al Fatah, rubricada hace medio año en El Cairo pero aún pendiente de aplicación.

También señaló que luchará contra la "judeización" de Jerusalén, "primer símbolo de Palestina"; que mantendrá la liberación de los presos palestinos "en el cenit de sus prioridades" y que animará a la Liga Árabe a "trabajar duro" para acabar con el bloqueo israelí de Gaza.
Fuente:libertaddigital.com