sábado, 3 de septiembre de 2011

El poder de la comunidad judía de Tui en la Edad Media centra las Jornadas Europeas


EVA GONZÁLEZ - TUI La prosperidad de la ciudad de Tui en los siglos XII y XIII propició la consolidación de uno de los principales núcleos judíos de Galicia. A lo largo de siglos formaron una pujante comunidad de gran poder económico e incluso eclesiástico. La celebración de la Jornada Europea de la Cultura Judía, que prosigue hoy, permitió ayer que más de un centenar de personas, entre ellas miembros de la Asociación Galega de Amizade con Israel, conociesen lugares, objetos y partes de la historia que se ha podido constatar.
Tui tuvo Aljama (gobierno judío) y una sinagoga junto a la antigua iglesia de Santa María de Oliveira, muy cerca de la catedral, de la torre vieja y del convento de las monjas clarisas de clausura. La sinagoga tuvo casas de reunión, oración y de estudio. La Torre do do Xudeu, en la conocida como "casa negra", es una referencia importante que visitaron en esta propiedad particular, junto a la antigua muralla de 1170. Los numerosos participantes en la visita organizada por la Concellería de Cultura de Tui y guiada por el historiador Suso Vila, conocieron en primer lugar los cinco sambenitos que se muestran en el Museo Diocesano de Tui y que se consideran los únicos testimonios conocidos hasta ahora en Europa. La Inquisición, que llegó a Santiago en 1574, mandaba colgarlos en las parroquias con el nombre y penitencias de los herejes reconciliados o relajados (quemados en la hoguera). De hecho, en algunas de estas telas aparecen pintadas las caras de estas personas, algunas de ellas pertenecientes a la influyente familia Coronel, a la que pertenecía el canónigo Francisco Coronel, cuyo padre tenía una banca en Roma, mientras que su hermano era recaudador.
El historiador y técnico de Cultura Rafael Sánchez Bargiela, colaborador en el acto, fue quien halló los sambenitos hace años, en una de las dependencias de la catedral de Tui y se percató de su enorme valor histórico. El lugar donde existió la carnicería, necesaria para los ritos "kosher", perteneciente a Pero Xudeo que habitaba en la rúa Triparia, fue otro de los puntos visitados, situado en el muro existente debajo de la Sala Capitular y cerca de la que fue una cárcel. Suso Vila mostró en el Museo catedralicio cálices y otras piezas realizadas por plateros judíos, como Abraam y Pero Amin, así como la Menorá (candelabro de siete brazos). Hoy se visitará una casa conservada.
Fuente:farodevigo.es

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