Zoltan Matyah, estadounidense y superviviente de Auschwitz, enseña su
número de prisionero en la entrada del campo de exterminio. JANEK SKARZYNSKIAFP-PHOTO
Los presidentes de Polonia e Israel, Andrzej Duda y
Reuven Rivlin, participaron hoy junto a miles de jóvenes en un acto en
el antiguo campo de concentración nazi de Auschwitz en recuerdo de sus
víctimas, en el que ambos intentaron limar asperezas tras la polémica ley polaca sobre el Holocausto.
"Nunca ha sido la intención de nuestro país aprobar una ley que bloquee el estudio y la búsqueda de la verdad histórica", dijo Duda en una comparecencia conjunta con su homólogo israelí, donde insistió en que "jamás hubo una hostilidad sistemática contra los judíos por parte del pueblo polaco".
Rivlin pidió a Polonia que "garantice el estudio de lo sucedido en el Holocausto", en relación a la polémica ley sobre el Holocausto aprobada por el Parlamento polaco este año, donde se contemplan penas de hasta tres años de cárcel por el uso de la expresión "campos de concentración polacos", una norma muy criticada por Israel y Estados Unidos.
Según sus detractores, esta norma supone un ataque a la libertad de expresión e investigación, y dificulta un acercamiento riguroso a los acontecimientos que rodearon el asesinato de millones de judíos por los nazis durante la II Guerra Mundial.
La ley, que provocó una crisis diplomática entre Varsovia y Jerusalén, ha sido remitida al Tribunal Constitucional polaco para que revise si su contenido vulnera la libertad de expresión e investigación.
Duda y Rivlin participan junto a algo más de 10.000 jóvenes, en su mayoría israelíes, en la 30ª edición de la "Marcha de los vivos" en el antiguo campo de exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau, para recordar a las seis millones de víctimas del Holocausto.
Sólo en Auschwitz, el mayor campo de exterminio del Tercer Reich, fueron asesinados durante la II Guerra Mundial al menos 1,1 millones de prisioneros judíos, además de otros grupos, como gitanos, homosexuales, comunistas o partisanos polacos
"Nunca ha sido la intención de nuestro país aprobar una ley que bloquee el estudio y la búsqueda de la verdad histórica", dijo Duda en una comparecencia conjunta con su homólogo israelí, donde insistió en que "jamás hubo una hostilidad sistemática contra los judíos por parte del pueblo polaco".
Rivlin pidió a Polonia que "garantice el estudio de lo sucedido en el Holocausto", en relación a la polémica ley sobre el Holocausto aprobada por el Parlamento polaco este año, donde se contemplan penas de hasta tres años de cárcel por el uso de la expresión "campos de concentración polacos", una norma muy criticada por Israel y Estados Unidos.
Según sus detractores, esta norma supone un ataque a la libertad de expresión e investigación, y dificulta un acercamiento riguroso a los acontecimientos que rodearon el asesinato de millones de judíos por los nazis durante la II Guerra Mundial.
La ley, que provocó una crisis diplomática entre Varsovia y Jerusalén, ha sido remitida al Tribunal Constitucional polaco para que revise si su contenido vulnera la libertad de expresión e investigación.
Duda y Rivlin participan junto a algo más de 10.000 jóvenes, en su mayoría israelíes, en la 30ª edición de la "Marcha de los vivos" en el antiguo campo de exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau, para recordar a las seis millones de víctimas del Holocausto.
Sólo en Auschwitz, el mayor campo de exterminio del Tercer Reich, fueron asesinados durante la II Guerra Mundial al menos 1,1 millones de prisioneros judíos, además de otros grupos, como gitanos, homosexuales, comunistas o partisanos polacos
No hay comentarios:
Publicar un comentario