La comunidad judía de Turín despide al rabino por demasiado conservador

Sinagoga de Torino

Tras dos años de discusiones, una comisión instituida por la Unión de comunidades judías italianas decidió anoche revocar el mandato del rabino jefe de Turín, Alberto Somekh, por su excesiva rigidez a la hora de aplicar las enseñanzas. La prensa local se hace eco hoy de esta noticia señalando que se trata de la primera vez que en Europa se toma una decisión tan radical movida por la dicotomía entre los rabinos crecidos en la ortodoxia, y las comunidades que viven situaciones como los matrimonios mixtos en los que es difícil de aplicar la dureza de las normas religiosas.

Somekh llegó a Turín desde Milán en 1992, presentando un judaísmo puro "sin tener en consideración la realidad de cada persona", acusaba la comunidad local. Los episodios que en particular más han dado que hablar están relacionados con funerales no autorizados por no tratarse de personas realmente practicantes, y con la prohibición de permitir el acceso a la educación judía a niños procedentes de familias en las que sólo uno de los padres era practicante. Pero el episodio que generó mayor polémica fue la negación del "bar mizvah", la celebración del ingreso a la edad adulta, del nieto del escritor Primo Levi, autor de la magnífica obra "Si esto es un hombre".

Los judíos de Turín constituyen históricamente una comunidad poco ortodoxa, abierta a la acogida. En cambio, el rabino revocado pertenece a una familia judía de origen iraní de antiguas tradiciones, de ahí su respeto férreo a la ortodoxia. Su poca comprensión de esta comunidad completamente diferente a él ha alejado a numerosos fieles de las sinagogas, como señaló recientemente la propia comunidad. "Hace diez años Samekh empezó a adoptar comportamientos y a iniciar acciones en neto contraste con la historia y la cultura de la comunidad judía de Turín", y éste es el motivo ahora de la decisión de la comisión creada para estudiar este caso. Samekh no perderá su cargo de rabino, pero ya no dirigirá a la comunidad de Turín que ahora espera la llegada de alguien que entienda mejor su realidad.
Fuente:abc.es