El Yom Hazikaron, el día del recuerdo a los caídos por
Israel, sumió ayer al país en el duelo. A las 11 de la mañana, como
hace una semana al rememorar el Holocausto, sonaron las sirenas, dos
minutos de silencio y homenaje. Ya hacía horas que los
familiares de los militares, policías y agentes muertos en ejercicio
acudían a los 43 cementerios militares del país para rendirles honores
en uno de los días más “difíciles” del año, como rememoraba
ayer Dalia, vela en mano, ante la tumba de su hijo Abraham, en el
jerosolimitano Monte Herzl. Cayó con 19 años en la guerra con Hezbolá de
2006. Este año 126 nombres se han sumado a la lista, que ya guarda memoria de 22.993.
Casi un millón de ciudadanos visitaron las tumbas, todas con banderas
nacionales y un banquillo a su lado donde orar. Un país entero de
recogimiento (10.524 familias afectadas), donde hasta el primer
ministro, Benjamín Netanyahu, tiene a quién recordar: su hermano
Jonathan, muerto en 1976 al liberar un avión en Uganda. Apenas los
palestinos (20% de la población) y los judíos ultraortodoxos se abstraen
de la estampa.
Hoy Israel muda el dolor por la festividad, en el Día de la Independencia, que conmemora el 64 aniversario de la declaración.
Fuente:intereconomia.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario