Por segundo día consecutivo, los ejércitos de Israel y de Líbano estuvieron hoy en estado de máxima alerta en la frontera común, y movilizaron tropas en la zona, aunque no se registraron nuevos choques armados como los que el martes causaron la muerte de un israelí y tres libaneses. Aun así, los militares enemigos mantuvieron contacto visual durante toda la jornada.
La tensión militar no impidió que el ejército israelí volviera a cruzar la valla con los brazos mecánicos de sus grúas con el fin de seguir talando árboles que impedían la visión correcta del territorio libanés y que estaban interfiriendo con los aparatos electrónicos que Israel ha colocado para detectar posibles infiltraciones.
Israel insistió en que ni el lunes ni hoy sus soldados cruzaron a territorio libanés, una versión confirmada por los cascos azules de UNIFIL desplegados en el sur de Líbano. UNIFIL sostuvo que, tal como dijo Israel, los árboles que están talando los soldados del Tsahal se encuentran del lado libanés de la valla, pero que a pesar de eso están en territorio israelí, puesto que la "línea azul" que los cascos azules trazaron en el año 2000 para delimitar la frontera precisa no discurre exactamente por encima de la valla que Israel ha construido.
Fuentes oficiales libanesas citadas por el diario beirutí Al-Nahar admitieron que el ejército libanés fue el primero en abrir fuego el martes. En el incidente murió un teniente coronel israelí y un capitán resultó herido grave. Ambos estaban en una colina cercana supervisando la operación. La inmediata respuesta del Tsahal, con tanques, artillería y helicópteros, causó la muerte de dos soldados y un periodista libaneses.
El Gobierno libanés no acepta la versión de UNIFIL de que los polémicos árboles que están talando los israelíes están dentro del territorio de Israel.
Incidentes en Belén
El ejército y la policía israelí intervinieron hoy para acabar con una protesta de un grupo de palestinos que intentaban impedir la construcción del muro que Israel construye en la localidad cisjordana de Al Walaja, cerca de Belén.
Diez personas resultaron heridas y otras 15 fueron detenidas por la policía israelí. Según varios testigos citados por la agencia Maan, la protesta transcurría de forma pacífica, con varios activistas palestinos y extranjeros sentados en el futuro tramo del muro, cuando los soldados intervinieron empleando gases lacrimógenos.
Fuente:publico.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario