Si los lazos entre la anterior flotilla "solidaria" a Gaza y los asesinos de Hamas han quedado acreditados, ahora las relaciones visibles son las de los organizadores de la nueva con Hezbolá la otra gran organización terrorista de la zona. Su líder ha llamado "perro infectado de lepra a Israel".
La prensa israelí se ha hecho eco de las relaciones de la nueva flotilla "solidaria" con el grupo terrorista Hezbolá, que opera en el sur del Líbano y que ya en 2006 mantuvo una guerra con Israel tras repetidos ataques tanto a posiciones militares como a objetivos civiles en el norte del estado hebreo.
Así, el principal responsable de la nueva flotilla, que saldrá del Líbano en los próximos días, es Yasser Qashlak, un hombre de negocios de origen palestino que trabaja en Siria y en el propio Líbano y que es también el líder del movimiento "Free Palestine".
Entre sus muchas tareas Qashlak ha sido editor de un periódico libanés que todo el mundo considera relacionado con el régimen sirio, una de las dictaduras más feroces del planeta de la mano de Bashar al-Assad y su partido Baaz de corte socialista y filonazi y a su vez con una intensa relación con Hezbolá, grupo terrorista al que arma y financia.
De hecho, el propio Qashlak publicó en su página web personal una carta a líder de Hezbolá, con el significativo título “Una carta desde el corazón a Hassan Nasrallah”.
“Israel es un perro infectado de lepra”
Las opiniones de Qashlak lo muestran como cualquier cosa menos un pacifista preocupado por la situación humanitaria de sus hermanos en Gaza. Así, en una entrevista en Al –Manar, la cadena de televisión de Hezbolá, hacía comentarios como que “Gilat Shalit (el soldado israelí que lleva años secuestrado por Hamas) necesita volver a París y el resto de los asesinos deben volver a Polonia”, pero aun así advierte que “continuaremos persiguiéndoles hasta que se haga justicia por las masacres que han cometido”.
Más todavía, en la misma entrevista calificó al Estado de Israel como “un perro infectado de lepra que ha sido mandado a esta zona para asustar a los árabes”, y claro, desde ese punto de vista no es raro que diga que “aunque nuestros líderes firmen acuerdos de paz no los respetaremos, nuestros hijos volverán a Palestina”.
Barco de mujeres
Una de las “novedades” de esta flotilla será que uno de los barcos que la compongan está ocupado únicamente por mujeres, en otro giro propagandístico que a buen seguro tragará la mayor parte de la prensa occidental. Pues bien, la capitana de la expedición será Samar Al-Haj, esposa de uno de los detenidos por el asesinato del Primer Ministro libanés Rafik Hariri con un coche bomba en el año 2005.
En aquella ocasión se consideró que el culpable último del asesinato era el régimen sirio, al que Hariri se había enfrentado durante prácticamente toda su carrera y esa es todavía la versión más plausible sobre lo sucedido.
Cuando se celebraba el primer aniversario de la salida de cárcel del marido de Sama Al-Haj, la pareja se reunió con el líder del grupo terrorista Hezbolá, Hassan Nasrallah, y la propia activista ha reconocido que lo que une a los miembros de su flotilla, de muy diversas procedencias, es el odio a Israel.
Así, el principal responsable de la nueva flotilla, que saldrá del Líbano en los próximos días, es Yasser Qashlak, un hombre de negocios de origen palestino que trabaja en Siria y en el propio Líbano y que es también el líder del movimiento "Free Palestine".
Entre sus muchas tareas Qashlak ha sido editor de un periódico libanés que todo el mundo considera relacionado con el régimen sirio, una de las dictaduras más feroces del planeta de la mano de Bashar al-Assad y su partido Baaz de corte socialista y filonazi y a su vez con una intensa relación con Hezbolá, grupo terrorista al que arma y financia.
De hecho, el propio Qashlak publicó en su página web personal una carta a líder de Hezbolá, con el significativo título “Una carta desde el corazón a Hassan Nasrallah”.
“Israel es un perro infectado de lepra”
Las opiniones de Qashlak lo muestran como cualquier cosa menos un pacifista preocupado por la situación humanitaria de sus hermanos en Gaza. Así, en una entrevista en Al –Manar, la cadena de televisión de Hezbolá, hacía comentarios como que “Gilat Shalit (el soldado israelí que lleva años secuestrado por Hamas) necesita volver a París y el resto de los asesinos deben volver a Polonia”, pero aun así advierte que “continuaremos persiguiéndoles hasta que se haga justicia por las masacres que han cometido”.
Más todavía, en la misma entrevista calificó al Estado de Israel como “un perro infectado de lepra que ha sido mandado a esta zona para asustar a los árabes”, y claro, desde ese punto de vista no es raro que diga que “aunque nuestros líderes firmen acuerdos de paz no los respetaremos, nuestros hijos volverán a Palestina”.
Barco de mujeres
Una de las “novedades” de esta flotilla será que uno de los barcos que la compongan está ocupado únicamente por mujeres, en otro giro propagandístico que a buen seguro tragará la mayor parte de la prensa occidental. Pues bien, la capitana de la expedición será Samar Al-Haj, esposa de uno de los detenidos por el asesinato del Primer Ministro libanés Rafik Hariri con un coche bomba en el año 2005.
En aquella ocasión se consideró que el culpable último del asesinato era el régimen sirio, al que Hariri se había enfrentado durante prácticamente toda su carrera y esa es todavía la versión más plausible sobre lo sucedido.
Cuando se celebraba el primer aniversario de la salida de cárcel del marido de Sama Al-Haj, la pareja se reunió con el líder del grupo terrorista Hezbolá, Hassan Nasrallah, y la propia activista ha reconocido que lo que une a los miembros de su flotilla, de muy diversas procedencias, es el odio a Israel.
Ella misma ha contado que se sintió motivada para organizar el barco de mujeres después de escuchar la llamada de Hassan Nasrallah para que se organizasen más flotillas y se rompa el bloqueo marítimo a Gaza.
Fuente:libertaddigital.com
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